viernes, 3 de abril de 2009

Material cerámico que amortigua los efectos de la humedad en interiores

Los edificios que deseen obtener una buena calificación de su eficiencia energética deberán prestar atención a las propiedades de los materiales que se empleen en su construcción. Una de esas cualidades es el comportamiento frente a la humedad. Un material con buenas prestaciones frente a la humedad ofrece una mayor durabilidad y menor consumo energético para satisfacer las condiciones de confort y calidad del aire interior.

Los problemas en las edificaciones derivados de la humedad se acrecientan en zonas con climas muy húmedos. En estos lugares el empleo de sistemas activos para el control de la humedad relativa de los ambientes interiores puede suponer un coste elevado. Por ello, es necesario desarrollar estrategias y sistemas pasivos que permitan conseguir unas condiciones climáticas interiores adecuadas bajo criterios de sostenibilidad. De ahí el creciente interés científico que está adquiriendo el conocimiento del comportamiento higroscópico de los materiales de construcción empleados en los edificios.

Ese es precisamente el campo en el que Iñaki Gómez Arriaran, profesor de la UPV/EHU y miembro del grupo de investigación ENEDI (Energética en la Edificación) de la UPV/EHU, trabaja. Desde noviembre del año pasado se encuentra en el Laboratorio de Medios Porosos y Propiedades Termofísicas de la Universidad Federal de Santa Catarina (UFSC), en Florianapolis, Brasil, donde, junto al profesor Saulo Guths, desarrolla una investigación sobre un material de construcción cerámico que permite amortiguar los efectos de las variaciones de humedad relativa sin necesidad de depender exclusivamente de los sistemas activos de acondicionamiento de aire para su control.

La investigación sobre ese material se centra en evaluar su potencialidad para ser empleado en los revestimientos interiores de los edificios destinados a museos y archivos de documentos, de manera que pueda actuar como regulador pasivo de la humedad. Ello conlleva la definición, desarrollo y ejecución de las técnicas de ensayo necesarias para conocer y cuantificar dicha capacidad.

En concreto, la investigación pretende conocer el comportamiento dinámico de este tipo de material frente a la humedad, lo que requiere conocer sus propiedades en cuanto al almacenamiento y transporte de humedad, así como su capacidad de amortiguamiento de las variaciones bruscas de humedad, también denominada Moisture Buffering Value (MBV).

Fuente: http://www.basqueresearch.com/berria_irakurri.asp?Berri_Kod=2140&hizk=G

No hay comentarios.: